HUMEDAD: filtraciones en resumideros de baños y balcones.
Como se ha manifestado en otros artículos publicados en el Blog de Grupo Lofer, las humedades representan para las edificaciones, una de las patologías constructivas de mayor incidencia dentro del amplio abanico de afecciones que pueden afectar a un edificio. Si bien en su prevención intervienen factores que deben ser considerados y abordados con seriedad desde la etapa de proyecto y posterior construcción de obra, como ser el método constructivo a utilizar, la calidad de materiales y mano de obra, los sistemas de impermeabilización a implementar, etc., resulta igual de importante, el correcto y periódico mantenimiento preventivo por parte de propietarios/inquilinos con relación a la unidad puertas adentro y de las administraciones en relación a espacios de usos común e infraestructura general.
En el artículo de hoy nos centraremos en un problema de humedad muy común en los edificios: la filtración de humedad a través de resumideros en baños y balcones. La aparición de este tipo de humedades tiene la particularidad que no solo trae aparejado un deterioro constructivo, afectando en lo inmediato pintura y revestimientos en la edificación vecina a donde se focaliza el problema, sino que también la reincidencia de este tipo de humedades genera tensiones y malas relaciones innecesarias entre vecinos y otras partes intervinientes en la resolución del reclamo, afectando la normal convivencia diaria del edificio. Si bien ante la aparición de este tipo de humedades, no deben dejarse cabos sueltos y realizar los controles técnicos necesarios para descartar pérdidas en conexiones de artefactos y cañerías – accesorios, resulta una realidad que resumideros tanto en baños como balcones, suelen taparse por la acumulación de suciedad producto del desarrollo de nuestras actividades cotidianas. La obstrucción de resumideros, trae aparejado un incorrecto desagüe de los mismos, produciendo un incremento en el nivel de agua hasta llegar al rebalse en algunos casos.
Ahora bien, la pregunta radica en… cómo se produce de forma concreta la filtración desde el resumidero hacia dentro de la losa y posterior aparición en el cielorraso de nuestro vecino? Los resumideros o también denominadas “piletas de patio” instaladas en baños y balcones, se componen de dos partes, por un lado la pileta de patio en sí misma, que constituye el receptáculo al cual se conectan los distintos artefactos del baño, a excepción del inodoro, y por otro el “porta reja” con la rejilla sea esta metálica o plástica, que se inserta dentro de la pileta de patio o resumidero. En la vinculación entre el portarejas y el resumidero, existen unos milímetros de separación en todo el perímetro de unión. Si bien en la resolución de esta unión y a modo preventivo optamos por utilizar portarejas de tipo “acanalados” en el tramo de unión complementados con una unión tipo O-Ring de goma, el paso del tiempo genera un deterioro en la junta elástica, convirtiendo está unión en un punto vulnerable al paso del agua ante el ascenso del la misma tras una obstrucción por suciedad en el desagües del resumidero.
El mantenimiento periódico de la pileta de patio tanto en baños como cocinas, resulta imprescindible en la prevención de este tipo de filtraciones. Una simple limpieza es la herramienta más importante que disponemos para combatir esta clase de humedades.